miércoles, 7 de septiembre de 2011

Palabras con sonido


La palabra salió de su boca surcando el viento como una botella mal cerrada que deja pasar el agua de un mar que no entiende de mensajes.
La fuerza se fue escapando hasta llegar débil e insignificante a un oído poco dispuesto a escuchar verdades.
Se juntó la duda interior con la incapacidad auditiva ajena y en su choque rompieron las olas con negra espuma.
La boca cerró sus ganas y la mirada buscó una réplica sin epicentro que no movió los cimientos.
Tragó la amarga espina de sentirse ignorado mientras la lágrima incontrolada resbalaba por las dunas de su cara.
Apretó los dientes y repitió la palabra que se transformó en tsunami e inundó la playa.
Descubrió que no existe mensaje fútil ni receptor apático o distraído, sino fuerza en palabras que rompen el silencio y sacan al mundo de su estado catatónico profundo.