De lo que no cabe duda es que el nombre con el que bautizaron al programa no pudo ser más acertado, además de premonitorio.
En la televisión, como en la vida en general, ocurre que se vive en un continuo subir y bajar en cuanto a los éxitos y los fracasos, aunque siempre en el medio televisivo es infinitamente más extremo.
El exitoso programa de telecinco no está pasando por su mejor momento, más allá de lo que demuestren delante de las cámaras.
Desconozco los datos de audiencia, quizá permanezcan intactos, pero La Noria se está atascando y quedando sin impulso publicitario para que pueda seguir girando.
Desde que realizaron la entrevista a la madre del Cuco, uno de los arrestados por la desaparición y supuesto asesinato de Marta del Castillo, a la que pagaron la friolera de 9000 euros por su intervención, los anunciantes se han ido retirando a pasos agigantados.
Sin ir más lejos, en la últimas semanas perdió el 67% de sus anunciantes, según publica el periódico El Mundo, pasando de 54 a 18 anunciantes, hasta llegar a este pasado sábado, en el que sólo tuvieron 5 anunciantes durante su emisión.
Lo que se traduce en sólo un corte publicitario de 2 minutos en prime time, de 10 a 12 de la noche.
Se pueden dar como válidas o no las cifras, pero lo que es oficial es la retirada de ciertas marcas tras la polémica entrevista.
La duda es si seguirá gozando del favor de la audiencia, que es soberana.
Cada programa, cada productora y cada cadena es responsable de sus contenidos.
Me reservo mi opinión para no influir en el pensamiento del resto, os corresponde a cada uno de vosotros decir si aquella entrevista, debía o no haberse emitido.
