miércoles, 2 de marzo de 2011

Apestados internacionales

(foto:noticias.terra.es)

La política internacional es una especie de bicho con vida propia que engulle y escupe de forma constante, a personajes y países según los intereses del momento.
Durante años puede haber impunidad para dictadores que suponen un negocio rentable para una gran potencia, quien a su vez tiene acuerdos comerciales con otra, mientras esta última le vende o le compra la conciencia a un país más pequeño.
Es como una pescadilla que se muerde la cola, aunque no vendría mal que literalmente algunos se la mordieran en lugar de liarse a dentelladas con los habitantes de su país. Pero el poder y el dinero son cosas demasiado jugosas para dejarlas escapar tan facilmente.
Los mismos que antes se hacían la foto con un personaje opresor de su pueblo pero suministrador de petróleo, ese oro negro que tapa muchas bocas, reniegan ahora de los contactos y las camaraderías.
Bueno, no todos, los hay que no ponen todavía sus barbas a remojar y contiúan haciendo uso de una gran boca chulesca y desafiante. Chávez sigue siendo de momento intocable por los citados intereses político-económicos internacionales, pero veremos a ver lo que dura.
Desde que el mundo es mundo las alianzas han existido, pero supongo que no a cualquier precio.
Lo hemos visto en Egipto, con Israel advirtiendo del peligro de la caída del régimen y la llegada de los islamistas radicales. En realidad lo único que les inquietaba era perder el pacto con Egipto, que durante años les ha ayudado a mantener a los palestinos controlados.
Nadie da puntadas sin hilo.
Aún quedan muchas dictaduras en el mundo y ojalá esto sea un principio de su final, de la desaparición de estos líderes que se auto-consideran dioses.
Quedan muchas barbas por cortar, ¿interesará económicamente?.