martes, 22 de febrero de 2011

La Tasa Robin Hood

(foto:http://www.oxfam.org/es/es/campaigns)

La idea parece que va ganando terreno en todo el mundo y parece que la petición está siendo al menos escuchada por dirigentes políticos de todo el mundo.
La Tasa Robin Hood, consiste en un impuesto aplicado a las transacciones que realizan las entidades financieras entre sí, que podría aportar importantes sumas de dinero para hacer frente a la pobreza dentro y fuera de Europa y combatir los efectos adversos del cambio climático.
En concreto se pide aplicar un impuesto del 0,05% a las transacciones financieras internacionales, lo que permitiría recaudar entre 150.000 y 520.000 millones de euros anuales para esos fines tan positivos.
Cientos de organizaciones en el mundo se están coordinando para lanzar este mensaje a la gente y a los políticos que deben llegar a un consenso en el próximo G20 que se celebra en Francia.
Sarkozy, Merkel y Zapatero han mostrado su voluntad de defenderlo en los foros internacionales. Más de 350 economistas del planeta han firmado posiciones públicas a favor.
Es positivo ver cómo aún no está todo perdido, todavía queda conciencia en el ser humano y entre todos podemos lograr grandes cosas. Querer es poder.
Siempre me ha gustado el personaje de Robin Hood y la idea que representa. No encuentro mejor nombre para este impuesto que quitaría muy poquito a los ricos, casi ni se darían cuenta, para darles un futuro mejor a los que no tienen nada.